Juan Rossetto nos sorprende con una obra intimista, con personajes enigmáticos en escenas cotidianas, intensamente iluminados entre densos y humeantes grises.
Sus trabajos presentan una composición cuidada y un estudio de luz y sombra proyectado a través de una profunda investigación en las técnicas de acuarela, óleo y temple.
Yo he trabajado con Rossetto por casi dos años y desde el principio me impresionó su voluntad por comprender, su creatividad y habilidad plástica.
En su obra reconocemos un pacífico dramatismo que nace de un espíritu místico y franco como el de Juan.
Anna Rank
Buenos Aires, setiembre de 1998